Poltergeist es una de las películas de terror más conocidas, no solo por su historia en la pantalla, sino también por las tragedias que ocurrieron tras bambalinas. Conocida como la "película maldita", Poltergeist ha sido relacionada con una serie de eventos desafortunados que afectaron a su elenco y equipo.
Durante la producción de las tres películas de la saga, varios actores y miembros del equipo fallecieron en circunstancias trágicas. La más famosa de estas tragedias fue la muerte de Heather O’Rourke, la joven actriz que interpretaba a Carol Anne, quien falleció a los 12 años de edad tras terminar la tercera entrega de la saga. Otros miembros del reparto también enfrentaron muertes misteriosas.
Muchos creen que estas tragedias están relacionadas con una maldición asociada a la película. Aunque nunca se ha probado, las coincidencias son suficientes para hacer que cualquiera lo piense dos veces antes de volver a ver Poltergeist, que está disponible en [Plataforma de streaming].
Un hecho escalofriante es que en la primera película de la saga, las escenas en las que los personajes interactúan con esqueletos dentro de una piscina fueron grabadas con huesos humanos reales, ya que, según la producción, era más económico que crear esqueletos de plástico. Muchos creen que este uso irrespetuoso de restos humanos fue lo que desató la supuesta maldición sobre la saga.